Modernismo

Critica a los llamados "comunistizadores" IV. Negación del Proletariado y de su dictadura

De la serie sobre los comunistizadores que estamos publicando, en este IV capitulo  vemos los precedentes de esta ideología que niega al proletariado, la dictadura del proletariado y en realidad reniega de la lucha de clases misma. Es una ideología que nada tiene que ver con el marxismo.

Crítica al "comunismo del decrecimiento" de Saito

La impotencia de la clase dominante frente a la catástrofe ecológica ha generado la necesidad de una especie de compensación ideológica, sobre todo por parte del ala izquierda de la burguesía. En este intento de recuperar la reflexión del proletariado hacia la ideología burguesa, se enmarca tanto la noción de la intervención ecologista del Estado como la del “decrecimiento”, que a primera vista va “más allá” de las ideas cada vez más ridículas de un capitalismo verde. Su misión es, sin embargo, deformar la teoría marxista y la lucha de clases, ofreciendo la ilusión de que serían “los ciudadanos de abajo” que a nivel local podrían ir construyendo “de abajo a arriba” iniciativas que reduzcan el ritmo del capitalismo y se encaminen a un supuesto comunismo. Lo analizamos en el artículo.

Crítica a los llamados "comunistizadores" III (2ª parte): Jacques Camatte: del bordiguismo a la negación del proletariado

En este tercer artículo de la serie sobre el modernismo y sus expresiones “comunizadores”, volvemos sobre las ideas de J. Camatte y las de otros ideólogos de esta corriente, evidenciando su cuestionamiento de la lucha del proletariado y el olvido de sus lecciones y experiencias acumuladas, lo que ocasiona un progresivo abandono del marxismo para caer en contradicciones y sinsentidos.

Crítica a los llamados "comunistizadores" III (1ª parte). Jacques Camatte: del bordiguismo a la negación del proletariado

Los “comunistizadores” forman una corriente política que pretende que la dominación del Capital ha alcanzado tal grado que ha acabado por absorber al proletariado y ha convertido a toda organización política -incluida las que se reclaman de la Izquierda Comunista- en un engranaje del capital. Teorizan pues la desaparición del proletariado y de toda organización comunista. En este tercer artículo de la Serie (primera parte) analizamos la evolución de Jacques Camatte que de militante del Partido Comunista Internacional acabó en la negación del proletariado y de toda lucha revolucionaria, confiando únicamente en una fantasmagórica e indeterminada “revolución de los individuos”. Este artículo tiene dos partes, la segunda parte ya la hemos publicado: https://es.internationalism.org/content/5018/criticas-los-llamados-comunistizadores-iii-jacques-camatte-del-bordiguismo-la-negacion

Críticas a los llamados “comunistizadores” (III): Jacques Camatte - del bordiguismo a la negación del proletariado

En este tercer artículo de la serie sobre el modernismo y sus expresiones “comunistizadores”, volvemos sobre las ideas de J. Camatte y las de otros ideólogos de esta corriente, evidenciando su cuestionamiento de la lucha del proletariado y el olvido de sus lecciones y experiencias acumuladas, lo que resulta en un progresivo abandono del marxismo para caer en contradicciones y sinsentidos.

Crítica de los llamados “comunistizadores” (II) Del izquierdismo al modernismo: las desventuras de la “tendencia Bérard”

El artículo anterior de esta serie presentaba a los “comunistizadores” y mostraba su relación con una corriente que surge a finales de los años 60 y que la CCI llama: modernismo. El artículo demostró el origen burgués de la ideología modernista a través de la génesis y evolución de esta corriente. Esta segunda parte se concentrará en una de sus primeras expresiones, la tendencia Bérard, que se formó en 1973 al seno del grupo Révolution Internationale (RI), la futura sección de la CCI en Francia.

Críticas a los llamados “comunistizadores”. (I): Introducción a la serie

Desde 1989 y el colapso de los regímenes falsamente llamados “comunistas” del antiguo bloque imperialista alrededor de la URSS, el marxismo genuino ha tenido que defenderse contra una campaña intensificada basada en distorsiones y mentiras, que afirma que el marxismo es una ideología anticuada y desacreditada que, puesto en práctica, sólo podía preparar el terreno para el gulag totalitario estalinista.

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