Medidas del gobierno ecuatoriano: la victima de la crisis capitalista es siempre la clase obrera

Printer-friendly version
AdjuntoTamaño
Icono PDF volante_ecuador.pdf124.29 KB

Las medidas adoptadas por el gobierno de Moreno al eliminar los subsidios a los combustibles afectarán directamente a la clase obrera con el aumento inmediato de los pasajes y de todos los productos de primera necesidad que requiere cualquier familia para sobrevivir. A todo ello, el congelamiento de salarios, despidos masivos, un día gratis a favor del Estado y reducción de vacaciones, anuncian un deterioro y una inseguridad de las condiciones de vida de los trabajadores, a un nivel peor que el de los esclavos. Ante esta situación, es legítimo el rechazo y la indignación contra estas y otras medidas que el gobierno capitalista de Moreno ha impuesto a los trabajadores para favorecer a banqueros, exportadores e importadores que serán los usufructoadores de estas medidas.

Las reacciones inmediatas ante las medidas de Moreno, no se han hecho esperar, los gremios de trasportistas han paralizado sus actividades, el movimiento indígena se ha adherido a la movilización y una serie de diversos movimientos sociales bien conocidos en el país. Sin embargo, estos sectores de la sociedad no luchan realmente contra la carestía de la vida, la inseguridad laboral, el desempleo, que estás medidas acarrean contra los trabajadores, muy posiblemente levantarán la medida de hecho ni bien lleguen acuerdos con el gobierno nacional.

Con ello todo el peso de la crisis recaerá sobre las espaldas de los trabajadores.

Además, las protestas de empresarios del transporte y de otros sectores de pequeños propietarios se plantean en un terreno difuso, de “ciudadanos” y, sobre todo nacionalista. En muchas de las protestas ondea la bandera de Ecuador, esta como las banderas de todas las naciones, es la bandera de la explotación, de la guerra, de los intereses del Capital.

Por tal motivo, las insipientes manifestaciones de trabajadores que han salido a rechazar las medidas en el sur de Quito, en Tulcán y en la provincia de Bolívar, deben servir de reflexión y de acicate para enfrentar una terrible crisis política y económica que se avecina. Por el momento nuestra clase atraviesa por enormes dificultades de unidad y de organización, sólo sabemos que las medidas nos afectarán directamente y no sabemos cómo reaccionar, a todo ello, no podemos confiar en los sindicatos que siempre terminan negociando los intereses del proletariado con la clase dominante. Así como tampoco representan los intereses de los trabajadores aquellos grupos de pequeñoburgueses de conspiradores y nacionalistas que procuran el aislamiento de los trabajadores y hasta tienen la desfachatez de representar eslóganes alusivos a nuestra clase como si fueran nuestra vanguardia. No lo son. Por tanto, la clase obrera necesita: 

  • Defender su AUTONOMIA POLITICA DE CLASE. No a la lucha en el terreno ciudadano y del “pueblo” donde se la quiere encerrar. Sí a la lucha por sus propias reivindicaciones que expresan las necesidades futuras de la humanidad. No a la bandera nacional ecuatoriana, Sí a la bandera de la unidad internacional del proletariado.
  • A auto-organizar sus luchas fuera y contra los sindicatos, en las fábricas, en los barrios y en las calles con Asambleas Generales y comités elegidos y revocables donde se discuta la situación de la clase obrera y cómo enfrentar la crisis capitalista.
  • A extender y unificar sus luchas autónomas incorporando a trabajadores activos, trabajadores de las fábricas, de los hospitales, de las universidades, del comercio, jubilados, del transporte, precarios, estudiantes, desempleados, TODOS UNIDOS. ¡Luchando juntos ganará nuestra clase!
  • No confiar en la democracia y las supuestas “libertades” que nos otorgaría el papá Estado. Ya hemos visto en qué consiste la democracia. Rápidamente el Gobierno de Moreno ha sacado al ejército a las calles y ha implementado el Estado de Excepción. No es con “derechos democráticos y constitucionales” como la clase obrera defenderá sus intereses sino con su LUCHA MASIVA, UNIDA Y SOLIDARIA.

Se prevé una nueva crisis mundial, por tal motivo las luchas en Argentina, Irak, Ecuador son respuestas ante el deterioro de las condiciones de vida de la clase obrera y los sectores no explotadores de la sociedad.

La crisis no tiene solución bajo el capitalismo, solamente la extensión y generalización internacional de la lucha obrera en todo el mundo podrá arrojar las bases para una salida: la REVOLUCION COMUNISTA MUNDIAL.

Internacionalismo Ecuador,

Sección de la Corriente Comunista Internacional

Octubre de 2019.

Contacto: [email protected]

Nuestra Web: es.internationalism.org

Geografía: 

Vida de la CCI: 

Cuestiones teóricas: 

Rubric: