Submitted by CCI Online on
El debate internacionalista sobre las experiencias históricas y actuales de la clase obrera se extiende a países donde nunca se había dado como por ejemplo República Dominicana. Hace 2 meses una delegación de la CCI animó un debate sobre el tema SOCIALISMO Y DECADENCIA DEL CAPITALISMO en dicho país (ver Acción Proletaria nº 197: Debate internacionalista en República Dominicana, /content/2046/debate-internacionalista-en-la-republica-dominicana ). Hace un mes se celebró una reunión pública sobre el mismo tema en Lima - Perú (ver en nuestra Web: Hacia la construcción de un medio de debate y clarificación, https://es.internationalism.org/node/2107 ). Ahora, gracias al esfuerzo y al entusiasmo de los compañeros del núcleo de discusión internacionalista de República Dominicana se ha celebrado una reunión sobre la experiencia de la Revolución Rusa de 1917.
El desarrollo de estas actividades aporta el viento fresco del debate proletario sobre los verdaderos problemas y las verdaderas alternativas de la situación mundial. En lugar de los temas que no conducen a ninguna parte (el nacionalismo, la revancha entre países, las reformas, la intervención del Estado) se empieza a hablar del internacionalismo, de la solidaridad, de las experiencias históricas y actuales de lucha de la clase obrera, de cómo luchar a nivel mundial por el socialismo etc. En lugar de "modelos nacionales de desarrollo" que la experiencia de los últimos 40 años nos ha mostrado que solo desarrollan la miseria, la opresión y la guerra; las discusiones empiezan a girar sobre la dimensión histórica e internacional de los problemas que aquejan a la humanidad, sobre el futuro que nos depara la sociedad capitalista mundial, sobre cómo desarrollar una solidaridad y una conciencia internacional del proletariado para salir del atolladero.
Estos debates internacionalistas no se dan únicamente en América del Sur, también tienen lugar en países tan alejados como Filipinas, India, Corea, Turquía... Poco a poco se van desarrollando las bases de un auténtico debate internacional sobre la lucha del proletariado, el internacionalismo, el combate por la liberación de la humanidad del yugo del capitalismo.
Señalamos a continuación a partir del informe de los compañeros del núcleo de discusión internacional las principales cuestiones que se discutieron.
Los compañeros utilizaron para lanzar la discusión la presentación común a escala internacional que hemos hecho en todas las reuniones públicas celebradas por las diferentes secciones de la CCI y en las que han colaborado simpatizantes en otros países.
Hubo coincidencia con la presentación en señalar que La revolución rusa se da en momento de la Primera guerra mundial, la revolución rusa fue una respuesta a la guerra.[1]
También hubo coincidencia en dos puntos que subrayaron los compañeros:
- la revolución rusa era socialista y no democrático burguesa.
- la base de la revolución fue la acción de la clase obrera agrupada en los Soviet (Consejos Obreros), es decir, la revolución socialista sólo puede ser realizada por los trabajadores mismos y nunca delegando su realización en el Estado a través de líderes "geniales" (la infame tradición de caudillos "socialistas" como Stalin, Castro o, actualmente, Chávez).
Un asistente subrayó que La revolución rusa, propagó al mundo entero los núcleos marxistas, en RD es a través de esa revolución es que llegan los primeros círculos marxistas, Lenin envía a La Vega a 4 rusos a organizar el partido democrático revolucionario dominicano, los cuales forman los primeros núcleo comunistas.
La Revolución Rusa provocó un enorme entusiasmo entre los explotados y oprimidos de todos los rincones del mundo, ello hizo que en todas partes se despertara el interés por las posiciones comunistas. Es evidente que no siempre hubo una total claridad. Así era una confusión, favorecida por los propios errores de los bolcheviques, el pensar que en los países semi coloniales, coloniales o con un insuficiente desarrollo del capitalismo, lo que estaba a la orden del día no era la revolución proletaria sino una revolución democrática burguesa (de ahí el impulsar un partido democrático revolucionario dominicano y no un genuino partido comunista)[2].
Un asistente planteó que La revolución rusa, demostró que en un país atrasado se podía hacer una revolución proletaria, contraria a lo que Marx establecía que en los países desarrollados era que iban a iniciar la revolución proletaria
Se ha repetido muchas veces que Marx se equivocó porque la revolución proletaria triunfó en un país atrasado y no en países desarrollados como Alemania o Gran Bretaña. En realidad, la revolución proletaria no se plantea a partir de la situación de tal o cual país tomado por separado y aisladamente sino a partir de la situación mundial del conjunto del capitalismo.
Con la primera guerra mundial lo que se demostró es que el capitalismo había formado el mercado mundial y había sometido a sus leyes a todos los países. Dentro de ese marco general había una enorme heterogeneidad: había países plenamente capitalistas, otros bajo el yugo colonial o semi colonial, la mayoría arrastraba importantes residuos feudales. Sin embargo, esas realidades nacionales, sin negar su peso, no eran determinantes. Lo determinante era que el capitalismo había llegado a sus límites históricos y que si sobrevivía lo único que causaría serían crisis, guerras y barbarie (como hemos podido comprobar en los últimos 100 años). Por tanto, independientemente de las múltiples y heterogéneas realidades de los distintos países, la evolución mundial del capitalismo llevaba a todos los pueblos de la Tierra a las guerras, la destrucción, la miseria, las hambrunas. Por tanto, la única solución posible era la lucha revolucionaria mundial por la destrucción del capitalismo y la creación de una sociedad nueva, el comunismo.
La Revolución Rusa no surgió en respuesta a las realidades particulares de Rusia (aunque los bolcheviques y los Soviet trataron de tomarlas en cuenta) sino en respuesta a la situación mundial creada por la primera Gran Guerra. Los Soviet y los Bolcheviques concibieron la Revolución Rusa como el primer paso en la lucha por la Revolución Mundial.
Los bolcheviques y los propios Consejos Obreros rusos dejaron bien claro desde el principio que la revolución iniciada en Rusia solo se salvaría si se extendía a los principales países desarrollados y especialmente a Alemania. Fue precisamente el aplastamiento de la tentativa de revolución proletaria en Alemania en 1919-23 (perpetrada por la Socialdemocracia y los Sindicatos) lo que impidió el desarrollo de la revolución mundial y significó la muerte de la revolución en Rusia.
En línea con esto último, los compañeros del núcleo defendieron en la discusión que "Precisamente la tesis del socialismo en un solo país fue el inicio de la derrota de la URSS", de lo que si hizo eco un asistente apoyando que ninguna revolución puede crecer ni sobrevivir sin una frontera solidaria.
Sobre los métodos de la revolución proletaria un asistente dijo que Marx estableció que la forma de llegar al poder es por las armas y no por el voto Precisamente la revolución rusa demostró que a través de los consejos obreros y la violencia de clase es que el proletariado toma el poder.
Sin embargo, la afirmación de otro asistente en el sentido de que No se puede descartar cualquier medio para la toma del poder, resulta ambigua y contradice la anterior.
No es cierto que cualquier medio valga. No valen ni las elecciones ni el parlamento. No vale la lucha guerrillera, la conspiración y el golpe de Estado. No valen el terror ni el terrorismo. Eso son medios propios de la burguesía y totalmente ajenos a la lucha revolucionaria del proletariado.
Frente al voto y el parlamento el proletariado ha desarrollado experiencias basadas en el poder colectivo de los Consejos Obreros.
Frente a las guerrillas y la conspiración el proletariado desarrolla la insurrección armada organizada masivamente por los Consejos Obreros.
No se puede asociar ni amalgamar la violencia colectiva y consciente del proletariado con la violencia minoritaria, ciega y brutal del terror y el terrorismo (se puede ver sobre este último punto el documento "Terror, terrorismo y violencia de clase").
Por tanto hay que rechazar la máxima jesuítica de "el fin justifica los medios". La burguesía -y en general todas las clases explotadoras- utilizan cualquier medio para mantener su explotación y opresión. El proletariado solo puede utilizar medios coherentes con sus fines que son los de la liberación de toda la humanidad.
La última parte de la discusión versó sobre la actualidad y se centró en Chávez. Varios asistentes plantearon que Chávez es antiimperialista por ser antiyanquista, frente a ellos los compañeros del núcleo defendieron que las burguesías tanto de derecha como de izquierda utilizan el descontento contra los EEUU para sacrificar la clase obrera y que Chávez lo que quiere es formar su propio imperio
Rosa Luxemburgo demostró en su obra La Crisis de la Socialdemocracia (se puede encontrar en Internet en español en https://www.marxists.org/espanol/luxem/09El%20folletoJuniusLacrisisdelasocialdemocraciaalemana_0.pdf ) que el imperialismo es un sistema mundial al cual ningún país se puede sustraer. El imperialismo no es una política especial de un país o de un grupo de países sino que todos los países participan en su engranaje. Todo Estado es imperialista.
Cada Estado juega con las armas de que dispone. USA tiene las suyas y opera a escala mundial. Otros Estados tienen ambiciones regionales. Pero no por eso son menos peligrosos o menos enemigos del proletariado y de la humanidad. El imperialismo es una espiral de barbarie que es alimentada por los conflictos, los enfrentamientos, de todos los Estados.
Es un engaño pretender que el capitalismo se caerá por que caiga la potencia imperialista de USA. Hoy USA con su aventura en Irak está muy debilitado pero la barbarie capitalista es desarrollada por él mismo y por todos sus rivales. Irán desarrolla la carrera a la bomba nuclear, en Oriente Medio desde Arabia Saudita hasta Egipto se lanzan a la posesión de armas atómicas, Chávez pretende también dar pasos en esa dirección. Esa brutal carrera hacia la posesión de armas nucleares imitando al Gran Hermano norteamericano es una expresión de barbarie, de puja imperialista y se hace a costa de la miseria y el sufrimiento de la mayoría.
El capitalismo solo puede ser derribado por el proletariado mundial que gane a su lucha a todos los explotados y oprimidos del mundo. Para que el proletariado pueda hacerlo debe defender ante todo su autonomía de clase que quiere decir no elegir campo entre los distintos Estados capitalistas que se pelean entre si y intentan seducir al proletariado para que se sume a su causa haciendo de carne de cañón. Contra todos los bandidos imperialistas el proletariado debe desarrollar su lucha independiente.