Enviado por CCI Online el
Saludamos los 2 encuentros recientemente realizados (Latinoamericano y México) como un paso importante a la reconstrucción de un movimiento revolucionario internacional si bien estamos de acuerdo con la mayoría de las conclusiones de los camaradas como ser que la crisis económica en la que se encuentra el capitalismo a nivel mundial es la peor de la historia de la humanidad y que recién empieza a manifestarse y que lo único que nos augura es mas hambre , miseria y muerte para la mayoría de la población especialmente para la clase obrera y los sectores marginales de la humanidad. Y que como dice unos de los documentos "Esta situación está llamando al proletariado a luchar Sin embargo, esta respuesta no es mecánica ya que es necesario también un proceso de reflexión que ayude a clarificar los propios métodos de lucha, recuperando su experiencia, para poder ser capaz de enfrentar las múltiples trampas que le tienden los órganos de encuadramiento social del Estado capitalista". Ya que a pesar de estar en crisis el capitalismo este no esta cuestionado como sistema por la mayoría de la clase obrera.
Por eso consideramos el siguiente párrafo de vital importancia: "En la medida en que las luchas se hagan cada vez más masivas, se presentará la oportunidad para que la clase obrera recobre poco a poco la confianza en sí misma, que redescubra que efectivamente representa una fuerza social, económica y sobre todo política cuando basa su accionar en su unidad y su conciencia, en suma, que recobre su identidad como clase." Que como clase recobremos nuestra identidad y que con cada lucha vayamos recobrando la confianza en nosotros como clase, que dejemos de lado toda ilusión de un capitalismo productivo o mas humano o de alternativa nacionalista o el falso paradigma del socialismo del siglo XXI que lo único que ha hecho en estos años fue crear una nueva capa de burócratas. A continuación les enviamos dos reflexiones una sobre la crisis actual que nos llevó tiempo realizarla y quizás este desactualizada pero creemos que sirve para el debate y otra sobre la supuesta amenaza de la gripe porcina esperando poder de nuestra parte mantener una comunicación mas seguida.
Crisis económica.
La crisis mundial capitalista que lleva más de un año todavía no se ha manifestado en toda su magnitud si bien empezó como una crisis financiera, supuestamente como consecuencia de los créditos subprime, esta se va convirtiendo en una crisis económica sin magnitud como tal, en la historia del capitalismo.
Pero el origen de dicha crisis se encuentra por un lado en la dificultad creciente del capitalismo, en relación a las posibilidades técnicas, de expansión constante de su base económica, y de la resistencia del proletariado, aunque en forma fragmentaria a una mayor explotación.
Por lo que es necesario recurrir a trucos financieros cada vez más amplios para mantener su expansión. Por lo que el capitalismo se otorga simplemente créditos sin respaldo a si mismo y alentando a la población a hacer lo mismo invirtiendo en la bolsa con acciones sobrevaloradas o endeudándose en hipotecas bancarias para obtener su propia vivienda, lo cual produjo una burbuja financiera y una valorización ficticia de las acciones de las distintas empresas. Con lo cual fue creando un endeudamiento cada vez mayor y repitiendo la misma formula tratando de patear la pelota hacia delante o esperando una solución mágica, hasta que esta estalló y que recién estamos digiriendo la consecuencia de dicho estallido.
Pero veamos los comentarios de algunos medios "revolucionarios" que califican el derrumbe económico como una derrota del capitalismo, pero a esto nada agregan, o en lo mejor de los casos, sueñan con una intervención del estado, al mejor estilo keynesiano, para que volvamos a tener estabilidad o recuperar los empleos y el poder adquisitivo; o con el socialismo del siglo XXI estilo Chávez y el resto de la camarilla de presidentes "progresistas". En esto, como en tantas otras cosas, los "revolucionarios" están de espaldas a la revolución.
Para encuadrar adecuadamente el objeto de nuestro análisis debemos preguntarnos que clase de crisis nos afecta. La respuesta obvia nos dice poco: porque las anteriores también fueron crisis de la economía capitalista. Dejando de lado las crisis intermedias sobre las que nadie habla en la actualidad, comparemos la actual con la del 30 como hacen todos los demás. Dicha crisis produjo una gran calamidad para la clase obrera que no solo perdió posiciones logradas por largos años de lucha sino que en varios países la desocupación pasó a ser de mas del 30% y a la cual el capitalismo respondió por un lado con el new deal, el fascismo y el estalinismo, para aplacar a la clase obrera, la que culminó con el estallido de la segunda guerra mundial y mas de 60 millones de muertos.
La crisis actual se desarrolla en un mundo capitalizado en su mayor parte. Todos los grandes Estados tienen Gobiernos capitalistas. La Burguesía ha obtenido en las últimas décadas un colosal triunfo sobre la Clase Obrera. La Política "Neoliberal" que ha reforzado su dominio y ha aprendido de sus crisis anteriores con lo que a podido postergar por unos años una nueva crisis de gran envergadura pero lo que no ha podido es detenerla y en la actualidad nos encontramos en el inicio de ella.
Pasemos a las conclusiones.
La crisis no es financiera sino económica y originada (principalmente) por la debilidad de la economía de los EE.UU y de los países centrales, al ser imposible una expansión infinita y que se esta propagando al resto del planeta.
La capacidad de financiamiento "genuino", o sea con créditos cobrables, ha llegado o va llegando, a su fin con las actuales relaciones entre las clases. Si estas no cambian a favor del Capital, queda como recurso crediticio la emisión monetaria sin respaldo.
La emisión sin respaldo exige un sólido control político de parte de los emisores. Pero la propia inflación lo socava, como muestra el caso argentino. El dólar estadounidense, a diferencia del peso argentino, es la moneda mundial (por lo que EE.UU. exporta su inflación) y su circulación depende de su dominio mundial y este está menguando.
La política de intimidación, para superar por otros medios, está en curso; la invasión de Irak, las amenazas a Irán, Nort Corea y otros países y las advertencias de Guerra Mundial de nuevo tipo no tienen otro significado. Con los comienzos de la invasión a Irak mejora la circulación del dólar y es de sospechar que la impresión por esa muestra de energía (fuerza) fue la causa.
La posible apertura a Cuba con un mercado de 10 millones podría dar un respiro aunque leve a la salida de mercancía y circulación de dinero aunque esta sea una sociedad empobrecida.
El incremento de la inflación y la debilidad militar demostrada hasta hoy anulan todo efecto.
Para mejorar la posición del imperialismo norteamericano queda la intensificación de la explotación de su Clase Obrera. Naturalmente esta también está en curso: los cambios en la legislación lo evidencian bien. Y dicha medida se repite en el resto del mundo país tras país va siguiendo estos pasos con el aval de las centrales obrera, que negocian bajas en los salarios con tal de mantener los empleos, pero igual se pronostica que 50 millones de trabajadores se quedaran este año sin el, a lo que hay que sumar a los nuevos que entra en edad de conseguir su primer trabajo.
Volviendo a nuestro asunto Financiero- Económico. Nos dicen los grandes gurues de la economía burguesa que habrá: recesión, estabilidad y expansión económica combinadas ambas con todas las alternativas financieras posibles. Todo está afirmado por expertos.
Nosotros nos hayamos ante ellos en una posición parecida a la de los revolucionarios ante el estallido de la Primera Guerra Mundial. Los "expertos", entre ellos todos los Estados Mayores Militares, anunciaban y creían en una guerra breve. Nuestros camaradas, para nada expertos en cuestiones militares, la supusieron prolongada basado en la paridad entre las fuerzas enfrentadas. Tuvieron razón. No podían no tenerla.
Y esta crisis va para largo tiempo y si bien el capitalismo se puede recuperar como lo ha hecho en otras oportunidades, esta solo se hará sobre la miseria, el hambre y la muerte de ciento de miles de obreros a lo largo del planeta, lo que nos auspicia un futuro cada vez más negro.
Ante tal perspectiva no nos queda otra alternativa que la unidad y la lucha de la clase obrera en defensa de nuestros propios intereses, la emancipación como clase y la construcción del socialismo.
Volviendo a levantar las consignas de los primeros revolucionarios, "Proletarios del Mundo Uníos"