En la campaña contra el derroche en el sector público ha realizado la introducción generalizada de lo que se conoce como prácticas Lean. Estas se basan en el sistema de producción Toyota. Se podría argumentar que la necesidad de recoger millones de vehículos Toyota en los últimos años no sería una buena publicidad para tal forma de trabajar, pero los gobiernos tienen la costumbre de seguir las modas en este tipo de cosas.