Enviado por CCI Online el
BCE, compra deuda al Estado. Derogación de: Pacto de Estabilidad, Ley 20/2012, Contrarreforma laboral, art 135 Constitución, Ley de pensiones. Gobierno de la agresión, dimisión. FMI crédito a Grecia. No a los referéndums trampa. Trabajadores europeos, unidos o vencidos
Vaya una propuesta de ejes básicos por los que luchar sin demora para ponernos de verdad a la altura de unas circunstancias dramáticas y de trascendencia histórica, que ya no están para las simplezas a las que nos tienen acostumbrados los sindicatos y la izquierda, y las consignas para niños de sus manifestaciones, o lo vamos a pagar como ni nos imaginamos. Para ello, todos los trabajadores/as debiéramos tener un conocimiento básico de las cuestiones aquí planteadas. Por eso, PÁSALO.
I.- No podemos esperar a septiembre. Deberíamos salir a la calle ya, con dos reivindicaciones básicas para evitar el “rescate” total o la suspensión de pagos y frenar la agresión de la burguesía española y europea a través del gobierno del PP y del Banco Central Europeo: ¡BCE, COMPRA DEUDA AL ESTADO YA! ¡GOBIERNO DE LA AGRESIÓN, DIMISIÓN!
Una vez más los procesos se aceleran sin darnos un respiro. Leo en El País “El rescate total [a España] ya no es inconcebible” (22 de julio) y economistas burgueses, pero no necios, alertan de la gravísima situación en la que se encuentra el Tesoro español necesitado de renegociar o pagar deuda en octubre a su vencimiento, por 27.658,20 millones de euros, cuando “los mercados”, como se ha comprobado en la subasta de la última semana y por la huída de la inversión en España, se están cerrando y/o exigiendo altísimos tipos de interés incluso para la deuda a dos años (más del 6,5%), cuando algunos analistas económicos dicen que una razonable prima de riesgo española debiera estar en los 300 puntos básicos (no en los 640). El Tesoro puede salvar los vencimientos y emisiones hasta finales septiembre. Sin crecimiento económico es muy difícil un saneamiento de las cuentas públicas (más ingresos, menos gastos en subsidios) y reducir el endeudamiento que debe financiarse a un coste ya insostenible o no encontrará quien lo financie. Las Comunidades Autónomas de Valencia y Murcia (ejemplos del PP) y Catalunya piden ayuda económica al Estado central porque en el mercado nadie les compra deuda pública, lo que supondrá a cambio recortes aun más brutales en esas comunidades, y más dificultades para las arcas del Estado central. Y se pueden sumar otras, lo que aumenta las dudas sobre la solvencia del Estado central y la sospecha sobre lo inevitable del “rescate” al Estado, ya intervenido por el rescate a la banca. El nuevo diseño para el fondo de rescate MEDE, por la insuficiencia de sus fondos, no inspira confianza, por lo que se disuelve el efecto balsámico de la última cumbre europea del 29 de junio.
El PP y el PSOE, más multitud de economistas, reclaman con fuerza y en términos cada vez más duros (1), una urgente intervención del Banco “Central” Europeo para comprar deuda, aunque sea en el mercado secundario (“segunda mano”), con el objetivo de bajar su tipo de interés (2). En tanto, el Presidente del BCE, Mario Draghi (proveniente del imperio bancario y especulador Goldman Sachs, como el Primer ministro de Italia, el “tecnócrata” Mario Monti) se mantiene en las mismas “El BCE no está para resolver los problemas financieros de los Estados” (El País, 22 julio), ¡depende de qué Estado sea (Alemania, España…) y sí para agravar los nuestros!, señor Draghi. Su misión supuestamente es la de evitar una subida de la inflación (un falso problema hoy) con el ridículo pretexto del pavor de los alemanes (los muertos será) a la hiperinflación de comienzos de ¡la década de los 20 del siglo pasado!, pobre hoja de parra con la que pretende ocultar las vergüenzas de su verdadero papel en la UE del capital que aquí comentaremos.
El FMI avisa que está pensando en cortar el préstamo a Grecia, lo que la llevaría a la suspensión de pagos para septiembre, obligaría a salir del euro y el mayor empobrecimiento de su población trabajadora, arrojándolos como a limón exprimido. La salida de Grecia podría tener consecuencias no calculadas para la UE y en especial para sus países más débiles como España.
Para agosto, “los mercados”, descontando acontecimientos próximos, tanto en Grecia como en España, pueden hacer repicar las campanas a funeral por una España ya intervenida a la portuguesa para octubre como tarde, como prevén muchos (también Jordi Sevilla, exministro del PSOE). Pero si a España se le cierran definitivamente los mercados, el “rescate” del Estado supondría entre los 300 o 600.000 millones de euros. España es la cuarta economía de Europa (no 1/4 como en un lapsus escribí en otro texto), y su caída puede arrastrar a Italia, que es la tercera, y Francia echaría a temblar. De este escenario, a nada que se les vaya de las manos, o a Alemania ya no le compense mantener la zona euro o prefiera reducirla a unos pocos estados, podría llegar a derivarse lo peor, la suspensión de pagos de España (el default), la quita a los acreedores (alemanes, franceses, etc.), el hundimiento de la zona euro tal como la conocemos, la vuelta a la peseta, un empobrecimiento mayor, tensiones crecientes entre los estados burgueses europeos liberados de sus compromisos y “solidaridades”, la vuelta al más rancio nacionalismo, graves conflictos para la década de los 30 con su crisis impulsada por el encarecimiento energético.
Pero tampoco ganamos nada con una UE del Capital más integrada a costa de la desintegración de la clase trabajadora, de nuestros derechos laborales y del “Estado de bienestar”, y con una UE militarista y agresiva en el mundo.
El “rescate” al Estado supondría ya la pobreza generalizada, la mutilación total del “Estado de bienestar” (subsidios, pensiones, sanidad…), privatizaciones, y que de la supuesta “soberanía del pueblo español” no queden ni las apariencias. Si con los recortes se acrecienta la recesión, con el “rescate” total y sus exigencias draconianas (el anti-crecimiento de todo para pagar la deuda), empeoraríamos, hacia la completa bancarrota, sin salida a muchos años vista (más de lo que, sin ello, prevé el CES, como comentaré).
Debemos dar una respuesta rápida y contundente. Los sindicatos nacionalistas vascos (ELA y LAB), sin esperar a más, han llamado a la Huelga General en Euskadi y Navarra para el 26 de septiembre, consiguiendo el respaldo de otros menores y organismos diversos. En tanto, CCOO, UGT y otros, se lo siguen pensando. Fueron los vascos quienes arrastraron a los demás a concretar y adelantar la HG al 29 de marzo y ahora podría volver a ocurrir.
II.- No a referéndums trampa y de pérdida de tiempo
Izquierda Unida ha hecho un “Llamamiento para una rebelión democrática” y junto a ella, los sindicatos, apelan a la necesidad de un Referéndum sobre la política económica de Gobierno del PP, y en particular sobre la última gran agresión, el hachazo general (IVA, funcionarios, parados, etc.) del Decreto-Ley 20/2012 (14 julio) ya convalidado por el PP gracias al rodillo de su mayoría absoluta en el Congreso.
Si bien la solicitud de un referéndum sirve para cuestionar la legitimidad de la política del Gobierno, y Cayo Lara de Izquierda Unida advierte que de no aceptarlo el gobierno, lo siguiente será pedir su dimisión, la propuesta tiene cuatro grandes pegas.
1) Fácilmente puede llevar a unos esfuerzos y lo que es mucho peor, a la inversión y pérdida de un tiempo precioso, en algo que no se va a lograr o que de conseguirse, sería el gobierno quien incluso podría ganarlo con una pregunta trampa y para asustar como “¿Prefiere estas medidas o que España se hunda del todo por espantar a los mercados y ponernos a los pies de los caballos de nuestros acreedores y de la Unión Europea (UE)?”, con la ayuda de la mayor parte de los medios de comunicación y la inestimable de la UE que haría su particular campaña del miedo a favor del gobierno. Entre la abstención de los asqueados, y el voto favorable de los atemorizados, más el de los burgueses y pequeño burgueses (“clase media”) convencidos, podrían ganar aunque sea por los pelos (incluso con un Sí muy minoritario con respecto al censo), como ha ocurrido en las últimas elecciones griegas. Recordemos cómo ganó el PSOE con Felipe González nuestra inclusión en la OTAN a pesar del referéndum y su inicial “de entrada NO”. Incluso si perdiese, no dudemos que la UE presionaría con amenazas para que volviese a celebrarse y ganarlo, como ocurrió en Irlanda con motivo del referéndum por el Pacto de Lisboa. Terminando por ganar formalmente, pretendería tener ya la más completa legitimidad para hacer lo que quisiese: mayoría absoluta y Sí en el referéndum, y nos quitaría legitimidad para protestar.
2) Derivada de la anterior, que siembra una confianza inmerecida en las instituciones y recursos de la democracia burguesa, siempre escorados para servir a los grandes empresarios, banqueros, etc. y garantizarles que salgan ganando. El abuso de los decretos-leyes es posible no sólo por los reglamentos, sino porque el gran capital está interesado en que así sea.
3) Además de la pérdida de tiempo, ya no lo hay para juegos florales porque el proceso se está acelerando hasta el vértigo y lo que debemos empezar a exigir desde ya es la dimisión del Gobierno que a este ritmo nos aboca a un “rescate” completo, o a la suspensión de pagos, al servicio de los intereses del gran capital español y europeo, y que pretende ante todo nuestra derrota como clase y no la supuesta salida de la crisis. La izquierda y los sindicatos están jugando con espadas de madera cuando el capital ya maneja los cañones.
4) Como lo demuestra Toxo, secretario general de CCOO, si el gobierno es tan audaz como para llamar al referéndum, entonces ya no convocarán huelga general, es decir, pasividad y dejarnos en manos de la decisión del gobierno que dará largas (no se monta un referéndum en una semana) y podrá ganarlo. Y como cree que no lo va a convocar, CCOO se entretendrá en organizar una consulta popular no oficial para octubre y la huelga volverá a depender de lo que diga el gobierno ante el resultado, con lo cual la huelga como pronto sería para finales de octubre. Sabe que todo está a favor de la huelga, teniendo además en cuenta el llamamiento en Euskadi y Navarra para el 29 de septiembre, pero no quieren convocarla cuanto antes sea posible, ni poner al gobierno en el brete de pedir su dimisión ni convocar nuevas elecciones.
III.- ¡BCE, compra deuda, no del sino AL Estado, ya!
El Banco Central Europeo (BCE) no es un verdadero Banco Central, sino un engendro porque es el único banco central del mundo al que se le ha prohibido comprar deuda del Estado directamente, en las subastas del Tesoro en el mercado primario, y que no lo considera su verdadera tarea ni en el secundario. Su filosofía y estatutos son los de cuidar ante todo la inflación y no prestar directamente a los estados sino a lo sumo, cuando le interesa a Alemania y otros, comprar la deuda en el mercado de “segunda mano” o secundario (ya encarecida en el primario). Con ello consigue tres grandes objetivos:
a) Que los bancos puedan recibir prestado del BCE al 1% o 0,75% y, si quieren, prestar al Estado, si pueden hasta al 7%, consiguiendo así grandes beneficios a costa de los ciudadanos (sobre todo los trabajadores/as que no podemos librarnos de unos impuestos directos e indirectos, injustos por su regresividad social). Luego, estos bancos pueden, en el mercado secundario, vender los bonos de deuda al BCE a un precio mayor o ventajoso cuando esos bonos pueden ya no interesar al sector privado, como puede ser en este momento en el que tener en la cartera mucha deuda española puede acabar siendo tan tóxico como los activos de las hipotecas y ejecuciones inmobiliarias (oficinas, viviendas, villas, suelo).
b) Que huya el dinero de países como España e Italia, que por su déficit y deuda son de solvencia cada vez más dudosa gracias en buena parte al BCE, para irse a países como Alemania y otros de su cuerda (Finlandia, Países Bajos, Austria, Dinamarca…), donde a cambio de “seguridad” pagan intereses reales mínimos o bajo 0 ¡más barato que al inicio de la crisis! Sus bancos nadan en liquidez y esos estados pueden financiar barato los gastos sociales que también reducen (Alemania ya no es lo que era para los trabajadores/as, sino la de los mini-jobs y niños en la pobreza por falta de ayudas sociales).
c) Que al aumentar el déficit (cada vez más por los intereses crecientes por la prima de riesgo) y la deuda, en cumplimiento del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (¿crecimiento de la miseria será?), que estipula conseguir en el menor plazo posible el 3% de déficit y el 60% de deuda, en relación con el PIB, tenga el gran capital (representado por los organismos de la UE y los gobiernos) la excusa perfecta para presionar a la reducción del déficit mediante el recorte de los gastos salariales y sociales del Estado (funcionarios y empleados públicos, sanidad, educación, pensiones, subsidios, etc.), y de la subida los ingresos mediante los impuestos sobre todo a los trabajadores/as y autónomos (IVA, IRPF, IBI, “copagos”, etc.).
El rescate a la banca española, al hacer al Estado primer responsable del pago de los intereses (inicialmente bajo, 1,5%) y de la devolución del capital (aunque con una carencia de 10 años y un plazo de devolución de 15), va a aumentar, por el miedo a su insolvencia, el tipo de interés de la deuda, con lo que incrementará el déficit por el pago de la deuda de la banca y por la ordinaria del Estado, sirviendo esto una vez más de pretexto para mayores recortes sociales. En tanto, los bancos podrán saldar sus deudas con otros bancos alemanes, franceses, británicos, etc., que así no precisarán de otro rescate a costa de los trabajadores/as de su país, a pesar de ser estos acreedores tan responsables como los deudores del desastre de la burbuja inmobiliaria española y otros despilfarros, y de que siguen escondiendo mucha basura bajo la alfombra, pero sin someterla a inspecciones como a la española.
El vicepresidente de la Comisión Europea, el “socialista” Joaquín Almunia, dice que España debería pedir al fondo de rescate europeo, el FEEF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, que será relevado por el MEDE, Mecanismo Europeo de Estabilidad que podría comprar deuda en el primario), que compre deuda para rebajar la tensión. Pero el FEEF impondrá más “condicionalidad”, es decir, recortes, también porque Alemania aprovechará para presionar, y las agencias de calificación pondrían la nota de bono basura al español y rebajarían la del FEEF. Según Almunia se debe respetar la sacrosanta “independencia” del BCE ¡de los ciudadanos, pero no del gran capital, norteeuropeo sobre todo!
La exigencia al BCE para comprar deuda viene también de la parte de la burguesía más perjudicada por esa estudiada e interesada pasividad del “independiente” BCE. Pero es el conjunto de la burguesía el que ha establecido desde el Tratado de Maastricht estas reglas porque durante el período de expansión y de la burbuja inmobiliaria a la burguesía española le vino de cine gracias a los préstamos a bajo interés del BCE y otros bancos europeos, a quienes también les convenía, aunque a largo plazo supusiese éste desastre que pagamos sobre todo nosotros. Muchos bancos pueden estar interesados en librarse de la deuda española consiguiendo que se la compre el BCE en el secundario a un precio mayor y así tener liquidez y beneficio. Por eso, lo que nos interesa a nosotros que haga el BCE es comprar la deuda directamente al Estado, es decir, en el mercado primario y, sin afán especulador, abaratarla muchísimo. Por eso la queja de la burguesía no es la nuestra y no pretendemos hacer un frente común con quienes están lanzando las mayores agresiones desde hace décadas contra los trabajadores/as. Nuestra exigencia al BCE es inseparable de la de dimisión del Gobierno. Nosotros deberíamos plantear la exigencia al BCE, porque tiene recursos incomparablemente superiores al FEEF (248.000 millones de euros) y MEDE (pendiente de conformidad por el Tribunal Constitucional en Alemania y otros países), el mercado primario siempre tiene menos demanda que el secundario y por tanto el BCE produciría más impacto, tendrá menos costes sociales, y debemos desenmascarar a este agente de la agresión del gran capital, obligarle a reducirla, debilitar a un pilar de la UE del capital, y que no se vaya de rositas como siempre. La dureza del BCE ante España es también una intimidación de Alemania a Francia para que Hollande acepte más austeridad, porque de verse en problemas, el BCE tampoco le asistiría. Por mucho que España “haga sus deberes” (recortes, contrarreformas…), si no hay perspectivas de rentabilidad por el crecimiento económico, el capital no bajará la prima de riesgo porque además el BCE se lo permite, y el BCE no se ablandará, pues sirve a la banca y a Alemania y a su objetivo de presión sobre el déficit. Si el BCE no está haciendo nada es porque con una España totalmente intervenida, el gran capital europeo tendrá todo el control de las riendas para exprimirnos y derrotarnos a los trabajadores/as, reforzando el predominio alemán. Sólo se moverá si nosotros le obligamos poniéndolo por fin como objetivo en nuestras luchas, comprendiendo que el campo de batalla está ya en Europa.
¡BCE presta barato a los bancos para que se enriquezcan a costa de los intereses de la deuda del Estado! ¡BCE, instigador de la subida de la prima de riesgo! ¡BCE = Banco Central para los Especuladores! ¡BCE, instigador de los recortes laborales y sociales! ¡BCE = Bandidos Capitalistas Europeos! ¡BCE, compra al Estado deuda ya!
IV.- ¡Pacto de Estabilidad y Crecimiento, derogación!
Este Pacto ya parte de una concepción viciada porque, comparados con el resto de Europa, el problema del déficit no es tanto de exceso de gastos como de insuficiencia de ingresos, sobre todo de los provenientes de impuestos al capital y la burguesía, y no pretende resolverse por ahí, sino por la reducción de los gastos salariales y sociales y el aumento de la carga fiscal a la población trabajadora. Su eslogan, con el símil bobo de la economía doméstica es “no gastar más de lo que se ingresa”, en lugar de “ingresar todo lo posible para los gastos necesarios”.
Este Pacto, tiene unos objetivos de déficit, unos plazos y ritmos, que incluso muchos economistas burgueses consideran, para el caso de España sobre todo, demasiado cortos y bruscos, muy difíciles de cumplir, si no imposibles, y en todo caso a costa de grandes sacrificios para la población (el juego de la horca: de los recortes a los hachazos y te tiro a la calle porque me toca) y de profundizar en la recesión, porque el capitalismo español, imposibilitado de volver a recurrir al tirón de un sector inmobiliario sobredimensionado totalmente, no tiene quien le sustituya a esa escala de producción y empleo, y menos en el marco de una recesión generalizada. Porque el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, a pesar de su nombre, no tiene instrumentos reales para promover el crecimiento, es sólo para dar mejor imagen y disfrazar lo que realmente hace: crecimiento de la pobreza y el paro.
Es además un mecanismo diabólico, una auténtica trampa. Se viene demostrando que por pretender cumplir así el objetivo del déficit se dificulta conseguirlo y se agrava la situación económica. Puedes recortar brutalmente los gastos, es decir, reducir el déficit, pero en cuanto al tanto por ciento del déficit, que se establece en relación con el PIB, el resultado puede ser que apenas haya una reducción, que no la haya, o incluso que aumente el tanto por ciento del déficit. ¿Por qué? Porque por rebajar los gastos, has acabado por empeorar la economía (menos consumo de los funcionarios, pensionistas, parados, menos inversión del Estado en bienes de equipo en sanidad, educación, infraestructuras, Investigación y Desarrollo, etc.) y por tanto reducido el PIB y empeorado la relación del déficit con el PIB vía porcentaje (3).
Como no se ha conseguido reducir el déficit, la burguesía, de mano del Pacto de Estabilidad, tendrá otra excusa para plantear una nueva reducción de los gastos salariales y sociales del Estado, y aumento de los impuestos antipopulares, para fracasar nuevamente o lograr un magro resultado. ¡Intentad llegar así hasta el déficit del 3% del PIB para 2014, y será a costa de los trabajadores y mayor recesión!
Al perjudicar todavía más el difícil crecimiento y con ello los ingresos fiscales del Estado, los inversores extranjeros desconfían de la economía española y de la solvencia final del Estado para pagar la deuda, lo que lleva a que retiren dinero del sector privado (de todos y de los bancos con riesgo por haber comprado mucha deuda pública) y a que exijan elevados intereses por comprar deuda.
El “gran éxito” de la última Cumbre europea con la iniciativa del presidente francés Hollande, se planteó 120.000 millones de euros (una rebaja en 10 mil millones de los iniciales) para el crecimiento, que en realidad, repartido, da para bien poco.
Pero lo que de verdad buscan no es tanto rebajar el % de déficit con respecto al PIB, como por el camino reducir los gastos salariales y sociales del Estado. Que eso suponga también el hundimiento de autónomos, pequeñas y medianas empresas, forman parte de la “purga” de la crisis para que sobreviva en mejores condiciones el gran capital, el más fuerte, en un mercado sobreendeudado y saturado, y con poco crédito disponible.
Para detener la agresión del capital, es fundamental lograr la derogación (declararlo nulo) del Pacto.
¡Pacto de Estabilidad y Crecimiento, pacto diabólico del recorte y del paro que, por poner al déficit reparo, rebaja el PIB y al déficit no pone fin! ¡El déficit es la deuda del capital! ¡Déficit en derechos laborales y sociales por pagar las deudas de los capitales! ¡No al déficit en derechos y gastos sociales, el copago a los capitales!
V.- ¡Ley 20/2012, el mayor recorte de la democracia, derogación!
Esta ley, la última gran agresión generalizada, cuyos ejes generales todos más o menos conocemos: subida del IVA, recortes a los funcionarios, a los subsidios de paro, a la dependencia, etc., es una aplicación de los objetivos del déficit establecidos en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, para acercarnos cuanto antes al maldito y sacrosanto 3% porque sí, acordado por la burguesía española y el resto de la europea.
Esta ley, unida a la Contrarreforma Laboral sobre todo, es la mayor muestra de que el gobierno del PP ha lanzado una auténtica guerra relámpago, y como dice Rajoy, está pisando el acelerador de las “reformas”, para derrotarnos a poder ser mientras siga en el gobierno, en una legislatura que se puede acortar por su creciente desgaste, es decir, antes del final de 2015.
Con todas estas leyes ¡y las que vendrán! su objetivo es imponer a favor del capital unos costes salariales y sociales mínimos, para facilitar los beneficios del gran capital ante todo, y en particular del exportador, y someternos para lanzar una agresión aun mayor cuando llegue con el pico o cénit del petróleo una nueva gran crisis en la década de los 30, pretendiendo amortiguar en parte el aumento de los costes energéticos partiendo de unos costes laborales y del “Estado de bienestar” bajo mínimos.
La ofensiva en toda regla ya la inició el PSOE congelando las pensiones, rebajando el sueldo de los funcionarios y con la nueva ley de jubilación y sistema de pensiones, que el PP pretende agravar todavía más adelantando la efectiva elevación de la edad de jubilación para todos y para la anticipada, endureciendo requisitos y recortando de hecho las pensiones. Esto nos espera para el otoño y más recortes a los subsidios de paro. El subgobernador del Banco de España, ante la escalada de la prima de riesgo, dice que para “inspirar confianza a los mercados” hacen falta más “ajustes”, y la inigualable Esperanza Aguirre, del PP, presidenta de la Comunidad de Madrid, avisa que “se tienen que terminar los subsidios, las subvenciones y las mamandurrias”, mientras muchos alcaldes del PP se suben y mucho sus sueldos a la vez que recortan.
¡Ley de la jubilación, del PSOE, derogación! ¡Contrarreforma laboral, derogación! ¡Trabajadores parados, más desamparados! ¡Ley 20/2012, al gran hachazo, nuestro rechazo, Derogación!
VI- ¡Reforma del artículo 135 de la Constitución, derogación!
En agosto-septiembre de 2011, gobernando el PSOE, de la mano del PP, a toda prisa, por la puerta de atrás y por la vía exprés, en la para otras cuestiones (como la Monarquía) inamovible Constitución Española, introdujo la reforma del artículo 135 por la cual se da prioridad absoluta al pago de la deuda sobre las demás necesidad del Estado, y se establece a partir de 2020 el déficit no superior al 0% del PIB, siguiendo las indicaciones del Tratado de Estabilidad de la Unión Europea firmado por España.
Es decir, nos deja atados de pies y manos frente a los acreedores, por injustas e impopulares que puedan ser las deudas, generadas en realidad por la burguesía (gigantesca evasión y fraude fiscal, impuestos que la favorecen a ella y perjudican a la población trabajadora y generan déficit, deudas con altos intereses por los especuladores y por el papel del BCE, deudas por el rescate a la banca, deudas por pedidos de armamentos, etc.).
Como si el Pacto de Estabilidad fuera poca condena (el objetivo del déficit del 3% del PIB y bajar la deuda al 60% del PIB), el Tratado de Estabilidad Coordinación y Gobernanza en la Unión Económica y Monetaria (llamado también, Pacto Fiscal) y su aplicación a España con la reforma del artículo 135 de la Constitución y la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, marcan el objetivo del déficit del 0% a partir de 2020. Eso significa cero patatero para el “Estado de bienestar”.
Con el Tratado de Estabilidad, el conjunto de la burguesía europea, encabezada por el gran capital, y en particular el alemán, pretenden derrotarnos ya para antes de 2020, de modo que se reduzcan enormemente los gastos salariales y sociales de los trabajadores/as para aumentar los beneficios del capital. Merkel y Sarkozy habían llegado incluso al acuerdo de conseguir el déficit del 0% para ¡2016! lo cual significa derrotar a los trabajadores/as alemanes y franceses a toda velocidad, y establecer esos objetivos para más países. El gobierno español se declaró a favor del mismo objetivo para ese año, aunque a este paso le resultará imposible y más si nos resistimos a acercarnos a esa meta tan destructiva para nosotros. Se centran en derrotarnos para 2020, pero no en poner todos los medios necesarios para cumplir antes de 2020 los objetivos contra el Cambio Climático requeridos por el plan del IPCC.
¡Reforma del artículo 135 de la Constitución, Derogación! ¡Tratado de Estabilidad, Derogación! ¡Derogación de todas las leyes españolas derivadas del Tratado de Estabilidad! ¡Reforma laboral, déficit 0, ataques del capital contra el obrero! ¡Déficit 0: derrotar a los trabajadores es lo primero! ¡2020 déficit 0%: ricos+ricos, trabajadores ko, Cambio Climático 10”
VII.- ¡Gobierno de la agresión, dimisión!
El PP ha llegado al gobierno gracias a un programa electoral que no era más que para conseguir los votos necesarios porque llevaba, más o menos elaborado, un programa oculto, el que de verdad tenía intención de imponer, como bien sabíamos los que no nos dejamos engañar por la demagogia del que ya quería hacerse pasar por el “partido de los trabajadores” (jua, jua, jua), y sobre todo los burgueses, grandes empresarios, banqueros, etc., tanto españoles como europeos, americanos, etc., que les apoyaron de un modo u otro.
Por tanto, se ha dado una estafa electoral, con el objetivo de conseguir una mayoría parlamentaria, a fin de imponer sin obstáculos toda una estrategia de agresión y derrota contra los trabajadores/as, desde los salarios a los gastos sociales del Estado, de acuerdo con el gran capital europeo (a través de los pactos y tratados de la UE).
PP programa oculto al servicio de la burguesía ----à Estafa electoral legal ---à Mayoría parlamentaria absoluta contra la mayoría social ---à A los trabajadores agresión, del capital la gestión ---à Gobierno Dimisión.
Por eso, y porque su objetivo es infligirnos una derrota histórica, abaratarnos al máximo y desmantelar todo lo que pueda el “Estado de bienestar”, no tenemos porque aguantar al PP hasta el final de la legislatura y en tanto sufrir sus agresiones y perder, tal vez de forma irreversible, muchos derechos laborales y sociales. Quien se impone mediante el engaño, la estafa, y pretende machacar a la mayoría social, sólo merece ser desalojado del poder, exigiendo su dimisión. Su permanencia sólo sirve para arriesgarnos a nuestra derrota por muchos años.
El PP sabe perfectamente lo que muchos, como el FMI, y el último, el Consejo Económico y Social (CES) (16 julio), estiman: España ¡en el mejor de los casos! no recuperará la situación económica y el nivel de empleo de 2007 hasta 2025, y siempre que se creen 300.000 puestos de trabajo netos anuales desde 2014. Esto, más que ser optimista, es estar en lo alto del ciclo maniaco-depresivo en el que uno toca las nubes. Para hacer sostenible un capitalismo con semejante nivel de desempleo, pobreza y desamparo público durante tantos años, con un futuro mucho peor de lo que calculan el CES y el FMI, con una década de los 20 terrible y de los 30 pavorosa, y evitar una revuelta social anticapitalista, es imperioso derrotar, someter, doblegar, humillar (el “¡que se jodan” los parados, de Andrea Fabra, parlamentaria del PP), desmoralizar, a los trabajadores/as, para que nos resignemos al destino que nos preparan. Por eso, la necesidad para el PP de aprovechar al máximo su tiempo de gobierno, de pisar el acelerador, aunque eso suponga “quemarse”, inmolarse “por la Patria” del capital, como también lo hizo el gobierno del PSOE con Zapatero a partir del 12 de mayo de 2010 sabiendo que eso le supondría una derrota electoral.
Ahora que incluso parte de sus electores se sienten engañados y perjudicados, que sectores en otro tiempo muy conservadores como los funcionarios de la burocracia, e incluso de tribunales, prisiones, policías, están sufriendo con especial saña las agresiones del gobierno, que la inmensa mayoría de la población es agredida de un modo u otro, y cada vez más amenazada, es ya el momento para empezar a exigir la dimisión del gobierno y mantenerla en cada una de las luchas ¡Que se vayan!
No debemos perder tiempo en exigencia de referéndums que pueden ser una trampa. Debemos hacerle pagar al gobierno caras sus agresiones e impedir que pueda seguir infligiéndolas, que llegue hasta el final de su mandato y que consiga cumplir su objetivo de derrotarnos para antes de 2016.
El desgaste del gobierno podría dar lugar a que el PP haga algunos cambios de ministros para ver si así calma algo a la población, como si fuese cuestión de personas y no de una política general. Si ve que se le complica más, la jugada del PP podría ser sustituir vía parlamentaria a Rajoy por otro del PP, o por un “tecnócrata” de la burguesía a lo Monti como en Italia, o llegar a un acuerdo con el PSOE, incluso hasta formar un “gobierno de concentración”.
A nosotros, quien forme parte del gobierno o quienes le apoyen es secundario. Lo fundamental es que no pueda llevar adelante la estrategia de agresión y derrota de los trabajadores/as establecida por el gran capital español y europeo en el Pacto y en el Tratado de Estabilidad, en la reforma del artículo 135 de la Constitución, en la contrarreforma laboral, en la ley de pensiones, etc. Es a esa política y a cualquier gobierno que piense llevarla adelante, a la que debemos derrotar para que no nos derrote a nosotros. Por eso exigimos la destrucción de esas armas (tratados y pactos europeos, leyes españolas) y su rendición (dimisión del gobierno).
¡PP, Gobierno de la estafa electoral, al servicio del capital, Dimisión! ¡PP, Gobierno del capital, gobierno de bancarrota, a los trabajadores, no nos derrotas! ¡Despedidos readmisión, Gobierno dimisión! ¡Gobierno del PP, a la cola del SEPE! ¡Del PP o PSOE, de la burguesía, gobierno es! ¡Gobierno de concentración, de la burguesía y su explotación!
VIII.- ¡FMI, da crédito a Grecia, no el golpe de gracia!
Si el FMI se niega a dar crédito a Grecia, el Estado será insolvente en septiembre, lo que le empujará a abandonar el euro y con seguridad a una mayor miseria a los trabajadores/as y el pueblo griego después de haberlo exprimido como a un limón con el “rescate” (hay “ayudas” que matan). Alemania está dispuesta a dar la puntilla negando también la continuidad de los créditos.
Los trabajadores/as griegos han luchado durante mucho tiempo con un coraje admirable contra un “rescate” que les quería hacer pagar pecados que no eran suyos sino de su burguesía (hasta la española envidiaría su capacidad para librarse de pagar impuestos) y los contratos de ésta con la alemana y francesa entre otras (como la enorme deuda a causa de la compra de armamento para un ejército, golpista no hace tantos años, en previsión de guerra con ¡otro socio de la OTAN, Turquía!).
Pero se han visto solos. No podemos dejarlos abandonados a su suerte ante esta nueva agresión del FMI, tanto por ellos como por nosotros, porque si seguimos con esta dinámica de cada uno agredido por el capital europeo en su conjunto, pero sufriéndolo en solitario, nos derrotarán país por país y así irán logrando su objetivo general para 2020. Después de Grecia, Irlanda, Portugal, iremos España e Italia, luego Francia, otros países y finalmente los alemanes.
¡Hagamos saber a los trabajadores/as griegos que estamos con ellos, mediante carteles y pancartas en inglés (o griego) en nuestras concentraciones y manifestaciones! Si no sabemos, los traductores de internet pueden ayudarnos con una frase sencilla. No necesitamos más que nuestra iniciativa.
¡Trabajadores griegos y españoles, contra los mismos explotadores!
IX.- Todo es una estafa porque lo que lo sustenta todo, también lo es: el régimen asalariado del trabajo
La democracia burguesa es una estafa, porque quienes gobiernan no nos representan. El PP puede abusar todo lo que quiera de su mayoría absoluta conseguida en base a una estafa electoral (programa oculto) y de los decretos-leyes; el PSOE puede impulsar sin referéndum siquiera una reforma de la Constitución que hipoteca nuestro presente y futuro (artículo 135); lo que elijamos no pinta nada frente al “voto” de “los mercados” o la bota de los militares golpistas; la “soberanía popular y nacional” no mantiene ni las apariencias ante esa realidad y unas instituciones europeas menos representativas de nuestros intereses si cabe, pero que trabajan muy bien a favor de los intereses del gran capital, incluso a largo plazo, para infligirnos una gran derrota histórica antes de 2020.
La crisis, originada en las burbujas inmobiliarias, la desregulación financiera, las hipotecas subprime, los productos derivados de la “ingeniería” financiera, la corrupción en las cajas de ahorros y en las instituciones autonómicas y partidos, la deuda a costa de rescatar a la banca y los que nos han conducido a esto, el timo de las acciones preferentes, la salida a bolsa de Bankia, la “amnistía fiscal” para los defraudadores, y un larguísimo y pestilente, etc., es lo que nos lleva a decir que la crisis es ante todo una estafa social y no una “catástrofe” natural en una economía socialmente neutra.
Si el capitalismo es tan bueno como dicen ¿cómo pueden ser sus resultados económicos, sociales, políticos, tan desastrosos? Por debajo de todos estos aspectos más o menos superficiales hay una realidad, que no quieren que descubramos, para que así nos quedemos en una visión muy limitada de la verdadera naturaleza de la estafa. El origen de todo, la base sobre la que se asienta la gigantesca estafa piramidal que es esta civilización, la madre de todas las estafas, es el régimen asalariado del trabajo porque supuestamente se paga con el salario todo el trabajo realizado, pero la burguesía en realidad se apropia de una parte que es de la que surge su beneficio, llamado por la clase trabajadora, plusvalía o valor extra, porque es el no pagado en el salario ni en los gastos sociales del Estado.
Pero esta estafa precisa de unas condiciones para producirse (no pagar todo el trabajo) y finalmente realizarse (vender el producto para poder realizar, en forma de dinero, el beneficio que contiene). Y es ahí donde el capitalismo se encuentra para producirla con los problemas del aumento de los costes en la energía, la maquinaria, los límites de la jornada de trabajo, la productividad, para generar plusvalía; y para realizarla, la limitación de los mercados solventes (todo el planeta ya es un mercado capitalista saturado) y de los compradores solventes (los salarios bajos permiten mucha plusvalía, pero cuando son la demanda, dificultan su realización por su poca capacidad de compra), por lo que se acaba recurriendo al endeudamiento masivo, la especulación, las burbujas, la financiarización y la “economía de casino”, porque no existen mercados tan amplios y con capacidad de compra suficiente para tanta mercancía, lo que conduce a la imposibilidad de pagar las deudas, a un reclamo de beneficios sin base real en la plusvalía de la economía productiva, y el estallido de burbujas con sus correspondientes tsunamis.
Esta estafa primordial no puede perpetuarse por mucho tiempo más. Ya ha entrado en su fase de decadencia, de senilidad, debido a las crecientes dificultades para su producción y realización, y sus enormes costes humanos, sociales y planetarios, como la futura crisis detonada por la energía, y el Cambio Climático.
El trabajo asalariado es la base sobre la que se levanta todo este edificio social que es el capitalismo y su civilización, desde las clases sociales, las empresas, los bancos, al Estado. Si las raíces están podridas, todo el árbol lo está; si su naturaleza es venenosa, lo son sus frutos. La crisis, la pobreza, el paro, la ofensiva de la burguesía para derrotarnos, la agresividad de sus Gobiernos, sólo es posible porque existe el capitalismo, es decir, el régimen asalariado del trabajo, y mientras no lo abolamos (no se puede simplemente derogando alguna ley), la burguesía seguirá amenazándonos. No es éste el lugar para más explicaciones, pero basta con leer a Marx y su teoría del trabajo asalariado y la plusvalía, disponible en internet, o los textos mencionados al final.
¡Para eliminar la estafa de la democracia, de la crisis, ataquemos la madre de todas las estafas: el régimen salariado del trabajo! ¡Régimen asalariado del trabajo, los trabajadores lo echaremos abajo!
X.- ¡Trabajadores europeos, unidos o vencidos!
Las reivindicaciones que valen para España, como derogación del Pacto y del Tratado de Estabilidad (de la Unión Europea) y de las leyes españolas derivadas de esto, como el artículo 135 de la Constitución, la ley 20/2012, etc., el régimen asalariado del trabajo, también valen en lo fundamental para los trabajadores/as de otros países de la UE, especialmente de la eurozona, como los griegos, portugueses, irlandeses, italianos, franceses, belgas, alemanes, etc.
Luchando por estos objetivos comunes podemos unirnos, hacernos fuertes, crear un frente unido, no con nuestra burguesía doméstica, sino entre la clase trabajadora y los sectores populares agredidos, de toda Europa.
Cada burguesía nacional, como está clarísimo en el caso de la española, no pretende proteger a sus propios trabajadores/as, sino derrotar a toda la clase trabajadora europea para antes de 2020. Por eso ¡las fronteras estatales no nos protegen de las burguesías, sino que nos aíslan del resto de nuestra clase y nos hacen más vulnerables a la burguesía doméstica y europea! La derrota de los trabajadores/as de un país, significa el debilitamiento del conjunto de la clase trabajadora europea y que el capital europeo se haga más fuerte, avanzando en sus objetivos para 2020: trabajadores/as derrotados, abaratados al máximo, y desmoralizados por muchos años para hacernos víctimas de mayores agresiones cuando llegue la crisis de la década de los 30 a raíz de dispararse los costes energéticos, y los riesgos de guerra dentro de Europa o desde Europa.
No nos interesa eso, sino una Europa menos dividida por los nacionalismos, en la que los trabajadores/as tengamos cada vez más unidad y más peso social y político hasta poder llegar a los Estados Socialistas Unidos de Europa como tarde para la década de los 40 para impedir la respuesta burguesa a la crisis de los 30 y la catástrofe del Cambio Climático sin medidas suficientes para antes de 2020 ni para antes de 2050 por parte de la burguesía. Pero para esto debemos impedir la derrota en España para 2016 y en toda Europa para 2020, lo que exige derogar los pactos, tratados y leyes que nos llevan a eso.
¡Por encima de las fronteras, unidad de la clase obrera! ¡Frente a la Unión de Explotadores, la unión de los trabajadores! ¡Europa será obrera o mal futuro nos espera! ¡Pena capital a la UE del capital!
XI.- Tomemos la iniciativa sin esperar a sindicatos y partidos
Los sindicatos y partidos de izquierda ya nos vienen demostrando de sobra sus limitaciones, atados a sus compromisos con el Estado, o con tal o cual fracción de la burguesía, estatal o nacional, o búsqueda de “consensos” con partidos más a la derecha que ellos.
Debemos empezar a prepararnos desde los centros de trabajo, estudio, oficinas de parados, etc. para mantener una lucha sostenida durante varios años. Allí donde estemos cada uno podemos impulsar la conversación, el debate, sobre cuestiones como las planteadas en este documento, sobre las derogaciones de los pactos, tratados y leyes con las que nos agreden y buscan derrotarnos para tenernos más sometidos y por muchos años, la necesidad de que este gobierno no consiga llegar al final de su legislatura e imponer su programa oculto en las elecciones, sobre los intereses comunes que tenemos todos los trabajadores/as de la eurozona, cómo el aislamiento estatal lleva al desastre y la derrota, la necesidad y posibilidad de unirnos por encima de las fronteras. Y todo esto llevarlo a las Asambleas, para debatir en ellas, decidir las reivindicaciones, las consignas, tanto las más concretas para hacer frente a las agresiones, como las más generales y comunes a todos como las expresadas en este documento, y las acciones a tomar, sin que líderes, comisiones, sindicatos o partidos, las mangoneen y tomen las decisiones a nuestras espaldas o sin un verdadero debate.
NOTAS: 1) Esteban González Pons, del PP, ha sido casi insolente el domingo “Si el BCE quiere, esto se acaba el lunes. Si no se acaba el lunes es porque el BCE no quiere o porque alguien no quiere que el BCE quiera. Puede que alguien, en contra del espíritu de la UE, quiera que España y los países del sur no pertenezcan al mismo club que los países del norte de Europa” (El País, 23 julio).
2) Su gran capacidad de demanda encarece el precio del bono pero como el interés es fijo, reduce su rentabilidad (también para el BCE), desanima así a otros posibles compradores y a los especuladores a corto que apuestan por la bajada del precio, y la presión al interés alto en las subastas del Tesoro (mercado primario) ante el riesgo de que ocurra todo eso si provoca la intervención del BCE; pero harán negocio los bancos que consigan vender alto al BCE, o a un precio aceptable cuando desean deshacerse de esos bonos porque no se fían suficiente del Estado o quieren liquidez para negocios mejores. Pero el efecto a la baja del tipo de interés es mucho menor que si el BCE comprase directamente al Tesoro en el primario.
3) Una aproximación sencilla. Supongamos, si antes el Estado tenía unos ingresos de 100 euros y unos gastos de 180, el déficit sería de 80 euros. Si el PIB era de 1000 euros, tenías un déficit del 8% del PIB (1000 x 8% = 80). Pongamos que puedes conseguir bajar el déficit a 60, pero por lograrlo en muy poco tiempo habrá sido a costa de reducir sobre todo los gastos y no de aumentar los ingresos o a costa de mayores impuestos a los trabajadores/as sobre todo (IVA, IRPF, IBI, “copago”), mermando su capacidad de consumo. No hay manera de que en esas condiciones se produzca crecimiento económico, al contrario, se profundizará la recesión, es decir, supongamos, a costa de bajar el PIB a 750. Tendremos otra vez el déficit del 8% en relación con el PIB (750 x 8% = 60), a pesar de haber reducido el déficit de 80 a 60 euros (un 25%). Si se pretendía bajar el déficit al 6%, se debería haber mantenido el PIB en 1000 (1000 x 6% = 60), lo que significa sostener la misma producción y demanda, en lugar de hundirlas, y por tanto no podría haber sido a costa de los gastos salariales y sociales y los impuestos a los trabajadores/as, sino a cuenta de mayores impuestos a los beneficios del gran capital y las grandes rentas ante todo.
Lector/a: para profundizar en los fundamentos y argumentación de esta orientación, e inspirarse en muchos eslóganes, los siguientes artículos y libros, todos seleccionados en Kaosenlared.
El futuro del mundo se juega en Europa esta década. Campaña “2020: déficit 0, trabajadores ko, Cambio Climático 10” (16/07/2012) seleccionado como “Destacado”.
kaosenlared.net/especiales/e/elcapitalismoenbancarrota/item/24902-el-futuro-del-mundo-se-juega-en-europa-esta-d%C3%A9cada-campa%C3%B1a-%E2%80%9C2020-d%C3%A9ficit-0-trabajadores-ko-cambio-clim%C3%A1tico-10%E2%80%9D.html.
“La UE del capital. Nueva era, nuevo rumbo. Trabajadores europeos, unidos o derrotados. Nueva estrategia” 22 páginas (14/06/2012) Seleccionado como “Destacado”. Descargando el archivo pdf, tendréis acceso a libros y artículos que vengo publicando en Kaosenlared
kaosenlared.net/especiales/e/elcapitalismoenbancarrota/item/21552-la-ue-del-capital-nueva-era-nuevo-rumbo-trabajadores-europeos-unidos-o-derrotados-nueva-estrategia.html.
“2016 déficit 0. La burguesía acelera para derrotar al proletariado. Por una campaña europea contra el déficit 0” 14 páginas (28/05/2012).
kaosenlared.net/especiales/e/elcapitalismoenbancarrota/item/19693-2016-d%C3%A9ficit-0-la-burgues%C3%ADa-acelera-para-derrotar-al-proletariado-por-una-campa%C3%B1a-europea-contra-el-d%C3%A9ficit-0.html.
“[LIBRO] Trabajadores en bancarrota y riesgo de derrota. ¿Cómo evitarlas y fortalecernos? Una guía” 94 páginas. (3/03/2012), seleccionado como “Destacado”.
kaosenlared.net/especiales/e/elcapitalismoenbancarrota/item/9979-libro-trabajadores-en-bancarrota-y-riesgo-de-derrota-%C2%BFc%C3%B3mo-evitarlas-y-fortalecernos?-una-gu%C3%ADa.html.
“Capital, energía y plusvalía. Por un ecologismo proletario. Comentarios a Ramón Fernández Durán. Llamamiento”.80 páginas (3/09/2011). kaosenlared.net/noticia/capital-energia-plusvalia-ecologismo-proletario-comentarios-ramon-fern.
“Horizonte 2050: Socialismo o Mega-Crisis. Recuperar nuestra vida y salvar la Tierra. Una propuesta de Marco” 25 páginas (14/05/2011) kaosenlared.net/noticia/horizonte-2050-socialismo-mega-crisis-recuperar-nuestra-vida-salvar-ti.